Para seguir el paso a paso para empezar a escribir desde cero, debes introyectar, como algo consuetudinario en tu vida y en tu comportamiento lingüístico, las observaciones que se hicieron en la publicación número 1 de esta serie. Esas actitudes frente a la lengua y, principalmente en la escritura, son para observarlas durante toda la vida.
Ahora sí, vamos a empezar a escribir.
Los documentos formales, casi todos tienen un formato específico, y por lo tanto, solo hay que obtener el modelo requerido y, en los sucesivo, con la tecnología de hoy, basta con modificar los datos y listo. Estás preparado para elaborar cualquiera de ellos.
Con la escritura creativa es diferente. Aquí sí hay que ir creando un modelo y un estilo propio, lo cual se consigue a través de la práctica. Como no es posible empezar y escribir como los grandes autores, se recomienda iniciar con escritos cortos y sencillos. Además, como para producir grandes obras se requiere mucha experiencia, disciplina y constancia, y éstas hay que desarrollarlas, se debe empezar por lo primero.
Para lograr lo anterior, como en casi todo en la vida, no existen fórmulas mágicas, sin embrago, sí existen recomendaciones.
Una es ponerle mano a la obra de entrada a lo que deseas producir. No olvides que hay revisa, revisar y revisar; ser muy autocrítico y de ser posible tener alguien que te revise y te corrija. Lo de revisar y corregir debe estar en el ADN del escritor y es algo inherente a la escritura . Sólo algunos grandes autores hacen pocas correcciones a sus escritos; sin embargo, siempre es muy bueno revisar y corregir por aquello de “el diablillo de los teclados”. Pero… hablando de revisar, ten en cuenta que todo en las vida es perfectible.
La número dos se recomienda más que todo para desarrollar el hábito de la escritura y la disciplina, e ir construyendo estilo propio. Se trata de llevar diarios personales o bitácoras según el estilo de vida que se lleve. Esta sugerencia, además, permite algo muy importante e imprescindible en la escritura, la organización, jerarquización y estructuración de las ideas. No olvides que entre más detallados y minuciosos sean los diarios y bitácoras, serán mas benéficos. Ahora bien, si lo prefieres, la combinación de ambas recomendaciones es aún más fructífera.
Por hoy, dejemos ahí. Nos vemos en la siguiente publicación.